¡Ten cuidado de no sentirte mal del sofá!
Aliang nunca es demasiado perezoso para salir después del trabajo y siempre se queda en casa jugando con su teléfono y su computadora. La última vez que tuvo vacaciones, se quedó tirado en el sofá de su casa durante varios días. ¡Sus amigos y familiares dicen que simplemente es un otaku gordo! No se lo tomó en serio, pero hace poco enfermó de repente. Al principio pensó que era un resfriado, pero tuvo fiebre durante mucho tiempo y fue al hospital para un chequeo. El médico concluyó que tenía "enfermedad del sofá" basándose en sus hábitos de trabajo, descanso y estilo de vida.
Los médicos dicen que hoy en día la gente se está volviendo cada vez más vaga y no les gusta hacer ejercicio. Se quedan tirados en el sofá de casa y navegan por Internet todo el día. Con el tiempo, ¡sufrirán la “enfermedad del sofá”! Sus síntomas son: dolores musculares, debilidad en las extremidades, mareos y dolor de cabeza. La gente suele pensar que al principio se trata de un resfriado y fiebre, pero la recuperación es demasiado lenta. Si este hábito de vida no se modifica durante mucho tiempo, la "enfermedad del sofá" causará grandes daños al cuerpo.
En primer lugar, si quieres prevenir la "enfermedad del sofá", ¡es mejor no elegir un sofá que sea demasiado blando! Este tipo de sofá hace que el centro de gravedad del cuerpo sea inestable. Las personas sienten dolor de espalda y fatiga después de estar sentadas durante mucho tiempo. Al mismo tiempo, es difícil que la columna vertebral humana mantenga una curvatura fisiológica normal cuando se está sentado en un sofá blando. Si no se levanta y camina con frecuencia, los músculos de la espalda se tensarán y provocarán o agravarán el dolor de espalda.
En segundo lugar, el sofá debe ser cómodo para sentarse.
El largo, ancho y alto de un sofá deben ser ergonómicos, por lo que debes prestar atención a lo siguiente al comprar un sofá: la altura adecuada para sentarse es equivalente a la altura de las rodillas; en segundo lugar, la profundidad: cuando nos sentamos en el respaldo del sofá lo más lejos posible, las articulaciones de las rodillas de una persona normal aún deben estar fuera de la superficie del sofá; por último, el ángulo del sofá. Si el ángulo es demasiado grande, será incómodo apoyarse en él y, al cabo de un tiempo, te dolerá el cuello.
Por último, no utilices el sofá como cama.
No es aconsejable permanecer sentado en el sofá durante mucho tiempo, ¡y nunca debes dormir en el sofá como si fuera una cama! Si permanece acostado en el sofá durante mucho tiempo con una postura incorrecta, el sofá ejercerá una presión anormal sobre el tejido muscular, lo que provocará dolor muscular con el tiempo, especialmente en los adolescentes en crecimiento, y también afectará el crecimiento óseo.