El arreglo floral también es una forma de cultivo.

Las flores son una hermosa vista que nutre los ojos.
Las flores son una brisa fresca que sopla a través del lago del corazón.
Estando entre flores, tendrás un temperamento feliz.
Experimentemos la alegría, la tranquilidad y la paz desde lo más profundo de nuestros corazones durante el proceso del arreglo floral.
Arreglar flores es una muy buena manera de cultivar el carácter. Al arreglar flores, uno debe estar tranquilo, concentrado, civilizado y elegante en el comportamiento, y sentir que uno se está comunicando con las flores con nuestro "corazón".
El arreglo floral es una especie de percepción espiritual. Colocar flores en distintos rincones de la casa y cuidarlas y apreciarlas con todo el corazón es también una forma de disfrutar de una vida refinada y tranquila.
El arreglo floral es un disfrute espiritual, por lo que a menudo se centra en el "corazón" más que en la "forma". A la hora de arreglar flores hay que estar erguido y concentrado.
Ser recto significa que el cuerpo, la línea de visión y el eje central del arreglo floral deben estar alineados; y estar concentrado significa eliminar distracciones y concentrarse en el arreglo floral que tienes frente a ti. Estos rituales de arreglos florales también son una forma de cultivo espiritual. Cuando la mente y el cuerpo están unidos, todas las preocupaciones se eliminan y el espíritu se sublima.
La mayoría de las personas modernas son animales dominados por el cerebro. Piensan y calculan constantemente todos los días, consumiendo rápidamente su poder cerebral y controlando sus cuerpos para seguir avanzando. Hace tiempo que olvidaron que nuestros corazones también tienen sentimientos. La relajación y la tensión son una sabiduría en la vida.
Si disminuimos la velocidad, dejamos de lado el bien y el mal complicados en nuestras mentes, tratamos de dejar que nuestros corazones tomen el control y sentimos cuidadosamente todo el proceso de algo que es relajante y nutritivo, es posible que descubras que la felicidad no es solo una expresión en tu rostro, es más como un manantial claro que burbujea desde el fondo de tu corazón, fluyendo lentamente a través de tu cuerpo casi seco, haciéndonos sentir hidratados y animados.
La belleza de un arreglo floral no solo embellece nuestras vidas y nos brinda una hermosa experiencia visual, sino que también refleja la actitud de vida y el temperamento del florista. Se puede decir que las flores son como sus creadores. En el proceso de arreglo floral, podemos conocernos, sentirnos y mejorarnos.
El arreglo floral es también una especie de meditación zen, una limpieza del alma y un cultivo del temperamento.